Crónicas Misionales

10 COSAS QUE UN MISIONERO DEBE SABER

Presidente James E. Faust del Quorum de los 12

1.  Usted estará bajo la llamada del Señor Jesucristo. “La mayoría de nuestros misioneros es joven e inexperto de las maneras del mundo. No obstante el Señor dijo: El que es ordenado por Dios y enviado, éste es nombrado para ser el mayor. A pesar de ser el menor, y el siervo de todos.” (DyC 50:26)

2.   Su presidente de la misión es el representante del Señor. “No lo critique ni lo rebaje, privadamente o públicamente. Si usted respeta su autoridad, y es obediente, humilde, enseñable, y sigue la misión como corresponde. Usted será un misionero exitoso”.

3.   El trabajo duro es más importante que el intelecto. “Presidente Ezra Taft Benson dijo: Uno de los secretos más grandes del trabajo misional es el Trabajo”.

4.  Hay que pasarlo bien. La única manera de hacer eso es TRABAJAR DURO.

5.  Olvídese de usted en su servicio. “Nada de lo que hagas mientras seas misionero debe interferir con tu importante mensaje: ni tu modo de vestir, ni el largo del cabello, ni tu actitud, ni tu conducta, ni la noviecita que hayas dejado atrás”.

6.   Nunca tengas disputas en tu compañerismo. “Sea la clase de compañero que a usted mismo le agradaría tener. Sea altruista en su relación con sus compañeros. Cuando hay disputa, el Espíritu del señor partirá, sin tener en cuenta quien es el culpable”. 

7.   Guarde su cuerpo limpio y en buena salud y sus alojamientos limpios. “El guardarse ordenado y limpio es conducente a disfrutar del Espíritu”.

8.  Aprenda a amar y servir a las personas entre quienes trabaja. “Usted debe orar a menudo para ellos que el Señor les llenará de amor cuando usted los sirve. Si no los ama, será difícil que los enseñe”.

9.   Estudie, pondere y enseñe de las escrituras, sobre todo el Libro de Mormón y el Nuevo Testamento. “Sepa la verdad hasta el punto que usted pueda declararlo claramente”.

10.  Usted debe saber que Lucifer lo opondrá y preparará para su oposición. “El desaliento es una de las herramientas del diablo. Tenga valor y adelántese. Reconozca que el evangelio se ha predicado con un poco de tristeza desde el principio. No espere que su experiencia sea diferente ahora”.

Su propio testimonio personal es la flecha más fuerte en su aljaba. “No sienta que usted debe tener una cuota de bautismos para tener éxito… Un viejo refrán enseña que usted puede contar el número de semillas en una sola manzana, pero usted no puede contar el número de manzanas en una sola semilla. La cosecha es del Señor. SU RESPONSABILIDAD ES METER LA HOZ”.

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