Crónicas Misionales

Extracto de la Tembijokuai 

(Revista´i de la misión)

Elderes y Hermanas, es un placer poder dirigirme a ustedes en esta ocasión. Realmente, estoy agradecido al señor por esta hermosa oportunidad. Deseo y ruego que cada uno de ustedes puedan gozar de la obra misional, y de este maravilloso tiempo que tenemos para servir al señor.

Hoy quiero dirigirme a ustedes para hablar de la importancia de ser guiados por el Espíritu.

En la sección 50 de Doctrina y Convenios en los versículos 13 y 14 dice; "¿a que se os ordenó? A predicar mi evangelio por el Espíritu, Si, el Consolador que fue enviado para enseñar la verdad."   Durante nuestra Misión debemos buscar la compañía del Espíritu, para así enseñar el evangelio verdadero en la forma en que Él señor ordenó, "Sí es de alguna otra manera, no es de Dios," 

Doctrina y Convenios 50:20.

Debemos ser sensibles al susurro del Espíritu para así ser guiados por Él a los elegidos del Señor, y también magnificarnos y progresar espiritualmente. Si somos merecedores del Espíritu, seremos protegidos en todo momento.

Quiero compartir una experiencia que viví hace 7 meses atrás. Estaba en Bella Vista. Una noche, Elder Sorensen y yo caminábamos a una parada de colectivo. Eran aproximadamente las 20:00 horas Nos dirigíamos a la casa de una familia miembro donde teníamos una noche de hogar. Ellos vivían lejos de nuestra pensión, por eso teníamos que tomar colectivo en esa parada. Siempre tomábamos el colectivo en esa parada, solamente caminábamos 3 cuadras de la puerta de nuestra pensión y llegábamos a dicha parada.

Al caminar hacia la para de colectivo sentí que debíamos doblar antes de llegar a dicha parada que que quedaba 2 cuadras mas lejos. Al sentir así, me desvié y llamé a mi compañero. diciéndole: "Siento que debemos ir por aquí". Mi compañero preguntó, "¿por que?" le dije que yo no sabia, sin embargo así lo sentía.

Tomamos el colectivo y nos fuimos a la noche de hogar. Al día siguiente mientras charlábamos con una señora, ella nos contó que esa misma noche en dicha parada justamente a las 20:00 horas dos hombres tuvieron una pelea con cuchillos o machetes.

Bueno en ese momento nos miramos con mi compañero y entendimos por que había sentido que teníamos que ir por otro camino, de lo contrario hubiésemos presenciado un crimen, o nos hubiese sucedido alguna desgracia.

Al ser atentos al susurro del Espíritu seremos guiados como mensajeros del Señor y podremos ir a donde Él desea, y estar en lugares correctos en horas correctas, y así encontrar a sus elegidos.

Mi testimonio es más fuerte cada día por vivir tantas hermosas experiencias en la Misión.

Sé que Cristo es nuestro Salvador y sé que si nos esforzamos como mensajeros seremos "Guiados por el Espíritu".

Les invito a buscar esa guía en sus vidas. Es mi oración.

Con Amor

Elder Quintanilla A.P.

Tembijokuai

Septiembre 2001

Crónicas Misionales